EL ESPEJO
Estás en busca de un espejo. Estás detrás de un jardín.
Con todos esos palos al fondo. Y con ese cielo.
Y lo que no cabe en el encuadre que podría ser un Sol.
No eres un cualquiera. Llevas sobre la oreja una flor.
Una margarita o una traviesa forma recogida de un prado.
No eres malo. A contraluz, pareces un simple bañista.
Pero no eres veraniego. Tu cuello es otoñal,
baja hacia la falda de la noche, que aún está sin salir.
Huele a gacela y tu piel no necesita dos manos.
Iba a mandarte una carta.Y descubrí
que en el remitente ponía tu foto
y en el anverso me ponía a mí.