CARA DE LUNA
Bugs Bunny ha salido a toda pastilla,
ha soltado en el aire su zanahoria
y su estampida ha dejado
un perfil polvoriento de mofletes naranjas.
Todo por causa de un cazador de vidas.
Entró en el cuarto Cara de Luna,
se acercó a la almohada.
Respiraba su amante con tos separada.
La quiso besar, dio media vuelta
y una espalda arqueada le dijo: Cambio de escena.
La baraja ha enseñado 3 ases y un 6 de diamante.
El Jefe apuesta toda su fortuna.
Delio, el Flaco, le sonríe con el labio seco
Sabe que aún le queda una mano.
Y en ella, él, arruinado, toma con los dedos sucios
el cuarto as que acaba con el juego.
Diluvia sobre la farola de un decorado.
Se está deshaciendo en puro directo.
Ayer la protagonista estuvo descompuesta.
Esta noche hay que 'redodar'
para que esta vez quede perfecto.
Y nadie sabe que la farola de cartón
pilló una pulmonía de miedo
y está a punto de estornudar
cuando se oye el grito de: ACCIÓN.
Así te veo, Cara de Luna.
A media vida, a caballo
entre la niñez y la vejez,
el trazo y la pintura,
la cuerda y la cordada.
No se competa tu perfil,
no se termina tu rostro
y en ese charco de silencio,
en ese clic avispado,
noto tu cara viva y despierta,
menguante como la Luna,
creciente como la Tierra.